Cuando el sonido transforma el amor,
Cuando la Diosa se hace Angel,
Es cuando apareces tú.
Así es el paraíso,
En el alma de tu amor,
El mundo que está en tu mirada,
Atrapó mi corazón.
Ahora toco el sonido,
Así como pruebo la bella luz,
Hoy miro tan bello el amor,
Cuando cerca veo una bella Diosa,
Siento bello el calor;
Al verte a ti tan hermosa,
No hay nadie tan preciosa,
Ninguna Diosa o ninguna flor.
Autor:
Miguel Ángel Rojas Ibarra.
Mazatlán, Sinaloa, México.
Viernes 10 de enero del 2014.