Te quiero
en mis noches de infierno
en mis
mañanas mojadas,
en la
caricia de mi almohada,
en el
roce de la toalla,
en el
retén de mi sostén,
en el
agua, que lava mi intimidad,
quiero
amanecer en tu regazo,
confundida
en tu abrazo, junto,
a la
ambrosía de tu boca,
rociarme
y llenarme con tu piel,
de fruta fresca,
y
reencontrarme,
enardecida en tu mirada
No hay comentarios :
Publicar un comentario